Una visita a una iglesia fortificada

Castilla y León es una región que desprende historia por los cuatro costados. Una historia construida a base de batallas y conquistas en las que los castillos tuvieron un papel fundamental. Actualmente, son cientos los que se conservan en pie, a pesar del paso de los siglos, y forman parte del reclamo cultural de nuestra tierra.

Desde el Hotel Cándido queremos hablaros de uno que se encuentra en la provincia de Segovia, el castillo de Turégano. A menos de media hora en coche de la ciudad y de nuestro hotel, el castillo de Turégano es una visita obligada para los amantes de la historia y la arquitectura militar. Monumento Nacional desde 1931 y declarada Bien de Interés Cultural, esta fortaleza tiene su origen en la España celtíbera y es el mayor atractivo turístico de la localidad. Alrededor del castillo de Turégano podemos encontrar dos murallas diferentes, ambas de forma rectangular. La primera estaba protegida por un gran foso y la segunda cuenta con una torre del homenaje digna de admirar. Otra de las particularidades de este castillo es que su interior alberga una iglesia: la iglesia románica de San Miguel. Este templo data del siglo XIII, por lo tanto, se levantó antes que el propio castillo y fue dos siglos más tarde cuando quedó integrado en él. Una de las teorías afirma que en su origen fue un granero.

Sin duda alguna, desde el Hotel Cándido recomendamos a todos los que decidan visitar Segovia que se acerquen hasta la localidad de Turégano para disfrutar de una fortaleza histórica. Y, como no podía ser de otra forma, en nuestro hotel os esperamos para que podáis relajaros después de una jornada de turismo tan interesante. Id haciendo vuestra reserva en el Hotel Cándido.

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