Sí es posible disfrutar de una oferta turística diferente. Lo comprueban a diario los clientes del Hotel Cándido, porque en un mismo establecimiento pueden alojarse, comer, pasear por amplios jardines e incluso darse un chapuzón en la piscina exterior en época veraniega. Pero lo que verdaderamente distingue la oferta de nuestra casa es el spa, situado en la planta inferior del establecimiento. El circuito spa, con una hora de duración, incluye la visita a la Gran Piscina Terapéutica, a 31 grados de temperatura, con jacuzzi, cascadas y cañón cervical, circuito contracorriente, sauna finlandesa, baño turco o Hamman y gimnasio.
Todos los espacios están especialmente diseñados para vivir una experiencia relajante. Sin duda, nada sería posible sin el equipo profesional que atiende las instalaciones, encargado del buen funcionamiento de los circuitos y de que nada le falte a quien pasa por ellos. Esta oferta se completa con un amplio muestrario de rituales y tratamientos de belleza, tanto para rostro como para cuerpo. En el apartado de Estética, incluimos manicura, pedicura, depilación, maquillaje, servicios de peluquería y rayos uva. Los denominados ‘pequeños placeres a la carta’ permiten combinar tratamientos de diversas partes del cuerpo (rostro, cráneo, hombros, espalda, piernas, pies), sobre los que se realizan exfoliaciones, envolturas y baños aromáticos.
Sin duda, experiencias muy variadas, en cuanto a su contenido, pero también a su duración, que se adaptan a todo tipo de géneros, edades y necesidades de nuestros clientes. Relajación, belleza… Así sí es posible desconectar de verdad. Porque el descanso en nuestras habitaciones pone el broche de oro a cualquier jornada. De la cabeza a los pies. Compruébalo y visita las instalaciones del spa del Hotel Cándido de Segovia.