En el Hotel Cándido no queremos ser más papistas que el Papa ni competir con esos baños al aire libre que podemos encontrar en Orense o en Bulgaria, o con esos complejos termales que, por fortuna, forman parte de la oferta turística de nuestro país. Somos conscientes del lugar que ocupamos en el sector con nuestras instalaciones de spa.
El milagro del agua, la burbuja, el calor de la piscina cubierta… siguen siendo el método de relajación en un viaje a la ciudad de Segovia. Un baño en el spa puede iniciar la ruta por la capital segoviana o rematarla a su regreso. No cabe duda de que disfrutar de la temperatura del spa en esta época del año es como jugar al escondite con el frío invernal segoviano. Os animamos a que visitéis nuestra ciudad y os alojéis en el Hotel Cándido. Antes de disfrutar de nuestro patrimonio, nuestros vinos y nuestra cocina, os invitamos a que encontréis en el agua la relajación necesaria para disfrutar de vuestra estancia invernal. Desde la bañera todo se ve mucho mejor, mucho más caliente. Nueve meses de invierno castellano que se combaten mucho mejor dentro de nuestro spa, contemplando cómo caen los copos de nieve en nuestros jardines. Es una sensación única que deberíais experimentar, al menos, una vez en vuestras vidas.
Esperamos haberos convencido porque, sin ninguna duda, sobran los motivos para huir del frío y desconectar del día a día en el spa del Hotel Cándido. Os esperamos en la ciudad de Segovia para que entréis en calor en una época en la que nuestra ciudad es un auténtico espectáculo navideño. No lo dudéis más e id haciendo vuestra reserva.